Las actividades artísticas, educativas y comunicativas para promover el uso eficiente y ahorro del agua serán la bandera que acompañará el mensaje dirigido a los habitantes, visitantes y turistas de la cuenca del río Otún, poblaciones que son foco de ¡Vivamos la Cuenca!, un proyecto que desde el año 2016, busca aunar y canalizar esfuerzos y recursos de tipo humano, técnico, logístico y financiero para adelantar una estrategia de educación ambiental que contribuya a la protección de los bienes naturales en la cuenca hidrográfica del río Otún.
De esta nueva fase serán beneficiarias 1.500 personas aproximadamente, entre docentes, estudiantes, artistas, líderes comunitarios, instituciones educativas, miembros de la sociedad civil y colectivos sociales y de gestión cultural. Se espera que el mensaje ambiental llegue a más de 7.000 actores o usuarios a través de un plan de comunicación que integra diferentes canales, entre ellos las redes sociales.
Diferentes estrategias como el diplomado “Viviendo Mi Cuenca”, un concurso de dibujo, los dispositivos teatrales y el Festival “¡Vivamos La Cuenca!”, harán parte del desarrollo del proyecto en esta quinta fase.
El diplomado estará orientado a líderes locales, instituciones educativas y gestores culturales. Allí se resaltará el uso de la fotografía como una herramienta para recordar, investigar y contar historias. Por eso, es importante anotar que los participantes de este taller realizarán sonovisos, una actividad creativa que consiste en narrar una historia por medio de fotografías. Por supuesto, historias que tengan relación con la Cuenca y el territorio.
Los estudiantes de las diferentes instituciones educativas serán los participantes del concurso de dibujo. Un espacio artístico donde ellos tendrán la oportunidad de realizar una creación que haga alusión al río, al agua o a su territorio. Las obras ganadoras serán plasmadas como murales en sitios específicos de la comunidad o la ciudad y presentadas en el Festival Intercolegiado, donde también se mostrarán los resultados obtenidos durante esta quinta fase del proyecto.
“Esperamos tener una gran fase y que a pesar de la pandemia, no se pierda ese trabajo que hemos hecho. Nuestro objetivo está muy bien enmarcado en el título del proyecto. Con ¡Vivamos la Cuenca! buscamos eso, que la gente viva la cuenca, que sepan qué es la Cuenca y de dónde viene el agua, que conozcan que este río nace en la laguna del Otún y que estamos orgullosos de eso, y porque una ciudad sin agua, es una ciudad condenada a morir”, expresó Federico Antonio Palacio Valencia , jefe departamental de gestión ambiental de Aguas y Aguas.
El proyecto también contará con el apoyo de diferentes programas académicos de la Universidad Católica de Pereira, que aportarán en diferentes líneas de conocimiento a esta estrategia de educación ambiental. El programa de Diseño Industrial, acompañará en la construcción de títeres y otras alternativas que faciliten la educación ambiental y promuevan el arte. El programa de Psicología y la especialización en Pedagogía y Desarrollo Humano, implementarán didácticas propicias y fortalecerán los distintos procesos pedagógicos del diplomado y Comunicación Social – Periodismo, apoyará el desarrollo de la estrategia comunicacional y la elaboración de productos mediáticos que respondan a los ejes temáticos del proyecto.
Según manifestó Luz Adriana Gallón Uribe – Directora de Proyección Social de la Universidad Católica de Pereira, “Vivamos la Cuenca es una estrategia importante para la ciudad y la Universidad Católica se une para contribuir de manera significativa al desarrollo de objetivos propuestos. La confianza depositada por el equipo de trabajo de Aguas y Aguas de Pereira, el amplio conocimiento que tiene la Universidad a nivel disciplinar y la experiencia en el contexto comunitario, permitieron afianzar las relaciones interinstitucionales e iniciar una nueva fase en pro de la protección de los bienes naturales”.
Con este proyecto se impactará no solo las comunidades aledañas al río, sino todos los habitantes de Pereira, Santa Rosa de Cabal, Marsella y Dosquebradas, a través de estrategias que promuevan la protección y conservación de la cuenca del río Otún.
Es una tarea de todos entender que el recurso hídrico es sinónimo de vitalidad, historia, cultura y tradición.